Tú, mi la almohada,
Mis labios sobre los tuyos,
La lluvia en la ventana...
Entrecerré los ojos callado y cansado...
Sobre sabanas arrugadas
Llenas de tu olor, de tu perfume...
Era cierto, estaban allí
Era verdad, eran míos,
Yo los puse allí…
Tu voz,
La locura, el deseo,
La locura, el deseo,
Tu mano... tu mano que me recorría...
Era cierto, era verdad,
Mi pierna estaba sobre las tuyas...
Era real
Fue...
Eras tú quien me quería,
Querías cada detalle de mí
Para devorarlo con tu fuego.
Es cierto, era verdad...
Que te vi, leerme, comerme,
Saborearme, mirarme con amor…
Y era una verdad,
Más verdadera que la verdad...
Eras tú como yo siempre he sabido que eras tú...
Verdadera, real, perfecta en tus imperfecciones...
Las palabras,
Las emociones, la magia,
Las emociones, la magia,
La no verdad de la verdad
Tu carne, tu piel,
Alimento de mi mente
Y mi alma...
Tu grito…
Creció en olas
Mientras gritabas amor
Y tú eras mi mundo cuando te viniste en mí...
Cuando a mí te aferraste
Eras mía, era cierto…
Y era cierto... todo era cierto...
Tan real como lo real…
Tan verdad como la no verdad.
Darío.