¿Cuándo serás tú, mi Diosa?

Y tu….
Rendida debajo de mi en actitud confiada y sutil
Con tus ojos café de pupilas dilatadas
Mis manos en tu rostro dibujándolo
Una y otra vez como para creérmelo
Besándote en la boca seca
Donde se entrecortan gemidos
Mi pecho sobre la delicadeza

De tus hermosos senos
Sube y baja a un ritmo sin compás
Como caballos locos corriendo en él.
Tus piernas entrelazadas a mi cintura
Dulce cárcel de la que no quiero salir
Tus manos aferradas a mi espalda
Arañan, recorren, conocen…
Tu sexo aprisiona al mío en constantes convulsiones
Que me dicen que tu orgasmo
Viene en vuelo rápido
Arrasando con todo
Hasta con mi resistencia….
Mi sexo se acompasa con el tuyo,
Húmedo, calido, nido…
Mi locura, mi delirio, mí amada…
Abro mis ojos con el dulce sube y baja

De tu respiración,
Miro los tuyos, que no son café
Son azules…
Nunca podrás ser tú…
Te busco en todas
Te siento en todas,
No me resigno.
Mi diosa.

Darío.